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Acceso a los alimentos, desperdicio de alimentos


Muchas zonas urbanas de bajos ingresos carecen de tiendas de comestibles y de acceso a alimentos nutritivos, como frutas y verduras frescas.

Cultivar sus propios alimentos es una excelente manera de crear un plato más saludable. Las investigaciones muestran que las personas que tienen acceso a frutas y verduras comen más de ellas, y que los niños que cultivan un huerto tienen más probabilidades de comer frutas y verduras y tienen un mayor conocimiento sobre nutrición y hábitos alimenticios saludables. Comer una dieta rica en frutas y verduras se asocia con un menor riesgo de muchas enfermedades crónicas, incluidas las enfermedades cardíacas, los accidentes cerebrovasculares, la presión arterial alta, la diabetes y la obesidad. MyPlate del USDA recomienda que todos llenen la mitad de su plato con frutas y verduras. Obtenga más información sobre la alimentación saludable con MyPlate . ¿Sabía que los dólares del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) del USDA se pueden utilizar para comprar semillas para cultivar alimentos, así como para comprar alimentos?

La agricultura urbana permite a las personas combatir el hambre y la pobreza en sus propias comunidades cultivando alimentos frescos y nutritivos e inspirando cambios saludables en la dieta. Hoy en día, el 15 por ciento de los alimentos del mundo se cultivan en zonas urbanas. Estos huertos generan empleo, crean espacios verdes que unifican los barrios y reducen la distancia que recorren los alimentos desde la granja hasta la mesa, lo que es mejor para el plato y el planeta.

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