(Council Bluffs, Iowa, 11 de junio de 2019) – El Secretario de Agricultura de los EE. UU., Sonny Perdue, emitió la siguiente declaración después de que el Presidente Donald J. Trump firmara la Orden Ejecutiva de Modernización del Marco Regulatorio para los Productos de Biotecnología Agrícola.
“Nuestro marco regulatorio actual ha impedido la innovación en lugar de facilitarla. Con esta Orden Ejecutiva, el Presidente Trump está poniendo una vez más a Estados Unidos en primer lugar y encaminándonos hacia la modernización de nuestro marco regulatorio para que funcione para nuestros agricultores, ganaderos y consumidores. Necesitamos todas las herramientas a nuestra disposición para enfrentar el desafío de alimentar a todos ahora y en el futuro; si no ponemos en práctica estos avances biotecnológicos seguros aquí en nuestro país, nuestros competidores en otras naciones lo harán”, dijo el Secretario Perdue. “Los avances en biotecnología basados en la ciencia son muy prometedores para mejorar la prosperidad rural y la calidad de vida en el corazón de Estados Unidos y en todo el mundo. Aplaudo al Presidente Trump por firmar esta importante Orden Ejecutiva que ayudará a los agricultores de Estados Unidos a hacer lo que aspiramos a hacer en el USDA: hacer lo correcto y alimentar a todos”.
Fondo:
La Orden Ejecutiva de Modernización del Marco Regulatorio para los Productos de Biotecnología Agrícola exige, entre otras cosas, la racionalización regulatoria para facilitar la innovación de la biotecnología agrícola en el mercado de manera eficiente, consistente y segura bajo un marco regulatorio predecible, consistente, transparente y basado en la ciencia.
Además, el Acuerdo Comercial Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC) establece normas sin precedentes para la biotecnología agrícola. Por primera vez, el acuerdo aborda específicamente la biotecnología agrícola para apoyar las innovaciones del siglo XXI en la agricultura. El texto abarca todas las biotecnologías, incluidas las nuevas tecnologías como la edición genómica, mientras que el texto del Acuerdo Transpacífico sólo abarcaba la tecnología tradicional del ADNr. En concreto, Estados Unidos, México y Canadá han acordado disposiciones para mejorar el intercambio de información y la cooperación en cuestiones relacionadas con el comercio de la biotecnología agrícola.
El USDA es una de las tres agencias federales que regulan los productos de la tecnología alimentaria y agrícola. Juntos, el USDA, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) tienen un Marco Coordinado para la Regulación de la Biotecnología y regulan estos productos para la salud humana, animal, vegetal y ambiental. Para los productos derivados de la biotecnología vegetal, las regulaciones del USDA se centran en la protección de la salud de las plantas; la FDA supervisa la seguridad de los alimentos y los piensos; y la EPA regula la venta, distribución y prueba de pesticidas para proteger la salud humana y el medio ambiente.
El USDA continúa coordinando estrechamente con la EPA y la FDA para cumplir con las responsabilidades de supervisión y proporcionar el entorno regulatorio adecuado. Esto garantiza la seguridad de los productos derivados de nuevas tecnologías y, al mismo tiempo, fomenta la innovación.
Según el anuncio del Secretario Perdue sobre la tecnología de mejoramiento vegetal emitido el 28 de marzo de 2018, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) no regula ni tiene planes de regular las plantas que de otro modo podrían haberse desarrollado mediante técnicas de mejoramiento tradicionales. Esto incluye un conjunto de nuevas técnicas que los fitomejoradores están utilizando cada vez más para producir nuevas variedades de plantas que son indistinguibles de las desarrolladas mediante métodos de mejoramiento tradicionales.
En abril de 2017, el presidente Trump emitió una orden ejecutiva que establecía el Grupo de Trabajo Interinstitucional sobre Agricultura y Prosperidad Rural “para garantizar el ejercicio informado de la autoridad regulatoria que impacta a la agricultura y las comunidades rurales”. Como Secretario de Agricultura, Sonny Perdue fue seleccionado para servir como presidente del Grupo de Trabajo, que incluye 22 agencias federales, así como líderes locales. Específicamente, la Orden Ejecutiva fue establecida para identificar cambios que, entre otras cosas, “promuevan la adopción de innovaciones y tecnología para la producción agrícola y el desarrollo rural sostenible a largo plazo… mejoren la seguridad alimentaria… [y] fomenten la producción, exportación y uso de productos agrícolas producidos a nivel nacional”.
El informe del Grupo de Trabajo al Presidente se publicó en enero de 2018 y en él se reconocía que “en el frente de la biotecnología, es necesaria una mejor coordinación de las regulaciones del Departamento de Agricultura, la Agencia de Protección Ambiental y la Administración de Alimentos y Medicamentos sobre la modificación genética de cultivos y ganado para reducir las barreras a la comercialización de entidades genéticamente modificadas seguras, beneficiosas y mejoradas. Nuestro sistema regulatorio debe proteger la salud pública, el bienestar, la seguridad y nuestro medio ambiente, al tiempo que promueve el crecimiento económico, la innovación, la competitividad y la creación de empleo”. El Grupo de Trabajo recomendó que el Gobierno Federal “continúe los esfuerzos para modernizar el sistema regulatorio federal para los productos biotecnológicos”, incluidas recomendaciones específicas para:
1. Acelerar la comercialización segura de nuevos productos biotecnológicos
2. Mejorar la navegabilidad del sistema regulatorio para los innovadores pequeños y medianos.
3. Promover la comprensión de cómo un enfoque regulatorio basado en el riesgo y la ciencia protege eficazmente a los consumidores, y
4. Eliminar las barreras comerciales injustificadas y ampliar los mercados para los productos estadounidenses.
###
