(WASHINGTON, DC, 2 de abril de 2019) — Un nuevo estudio publicado por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) concluye que las emisiones de gases de efecto invernadero del etanol elaborado a partir de maíz son aproximadamente un 39 por ciento más bajas que las de la gasolina. El estudio también afirma que cuando el etanol se refina en refinerías que funcionan con gas natural, las emisiones de gases de efecto invernadero son incluso más bajas, alrededor de un 43 por ciento más bajas que las de la gasolina.
“Estos nuevos hallazgos aportan más pruebas de que los biocombustibles del corazón de Estados Unidos reducen los gases de efecto invernadero incluso más de lo que pensábamos, y de que nuestros agricultores y plantas de etanol siguen volviéndose más eficientes y eficaces”, dijo el Secretario Sonny Perdue. “El presidente Trump ha dejado muy claro que está desatando todo el potencial de la producción energética estadounidense a medida que recuperamos nuestro lugar legítimo como líder mundial. Ampliar la venta de E15 durante todo el año ofrecerá a los consumidores más opciones cuando carguen combustible en la bomba, incluido un combustible ecológico con menos emisiones. Agradezco al administrador de la EPA, Andrew Wheeler, que haya actuado con rapidez para finalizar la reglamentación sobre el E-15 antes del inicio de la temporada de conducción de verano”.
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El estudio, dirigido por el Dr. Jan Lewandrowski de la Oficina del Economista Jefe del USDA, y publicado en la revista Biofuels , respalda los hallazgos de otras investigaciones que indican que el etanol tiene un perfil de gases de efecto invernadero significativamente mejor que el estimado anteriormente.
El estudio, titulado “ Los beneficios del etanol de maíz en materia de gases de efecto invernadero: evaluación de la evidencia reciente ”, atribuye gran parte de estos beneficios adicionales a las estimaciones revisadas de los impactos del cambio de uso de la tierra como resultado de la demanda de etanol. Si bien las estimaciones anteriores anticipaban que los agricultores incorporarían más tierras a la producción como resultado del aumento de los precios del maíz, un análisis reciente encuentra solo aumentos modestos en la superficie cultivada. Las mejoras adicionales en las refinerías de etanol, combinadas con prácticas de conservación en las granjas que reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, como la reducción de la labranza y los cultivos de cobertura, han reducido aún más las emisiones asociadas con el etanol de maíz. El estudio proyecta que con mejoras adicionales en las refinerías y en las granjas, es posible una reducción de más del 70 por ciento en las emisiones del ciclo de vida para 2022.
Más información sobre el perfil de gases de efecto invernadero de los biocombustibles está disponible en www.usda.gov/oce/oeep .
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