La carne puede dominar las parrillas, pero el mercado de alternativas a la carne a base de plantas está creciendo. Ese crecimiento se debe, en parte, a la creencia de que los productos a base de plantas son menos susceptibles a patógenos como E. coli y Salmonella .
“Muchos consumidores creen que los alimentos de origen vegetal están mínimamente procesados, son más saludables y nutricionalmente superiores a sus contrapartes de origen animal similares”, dijo John Luchansky, científico principal de la unidad de Investigación de Seguridad Alimentaria y Tecnologías de Intervención del Servicio de Investigación Agrícola (ARS) en Wyndmoor, Pensilvania.
Luchansky dijo que si bien ha habido mejoras en la calidad de la carne de origen vegetal, hay pocos o ningún dato sobre la seguridad de dichos alimentos en relación con los patógenos microbianos.
En general, los consumidores consideran, y con razón, que las hamburguesas de carne son crudas y que es necesario cocinarlas antes de consumirlas. Por otro lado, muchos consumidores consideran que las hamburguesas de origen vegetal no son crudas porque contienen material vegetal y algunas plantas se pueden comer crudas.
“En realidad, las plantas a veces pueden albergar altos niveles de patógenos transmitidos por los alimentos y, como tal, las hamburguesas a base de plantas deben considerarse y manipularse como, por ejemplo, la carne molida cruda”, dijo la socia de investigación de Luchansky, Anna Porto-Fett, microbióloga.
"Si sigue las 'Cuatro C de la seguridad alimentaria', que son cocinar (160º F), limpiar , no contaminar de forma cruzada y enfriar , puede reducir considerablemente, pero no eliminar, el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por los alimentos", dijo Porto-Fett.
