Cada año, aproximadamente 100.000 avalanchas arrasan montañas en todo Estados Unidos, dañando todo lo que encuentran a su paso y matando a 28 personas en promedio.
En menos de siete semanas, a partir del 18 de diciembre de 2020, las avalanchas se cobraron la vida de siete personas en Estados Unidos mientras esquiaban, practicaban snowboard y motos de nieve.
Le pedimos a Simon Trautman, un especialista nacional en avalanchas del Servicio Forestal del USDA, que nos brindara algunos consejos para garantizar que los días divertidos en la nieve sigan siendo así. O, si ocurre lo peor, cómo aumentar las probabilidades de supervivencia.
1. Infórmese antes de ir
“No es sorprendente que la mejor manera de sobrevivir a una avalancha sea no quedar atrapado en ella en primer lugar”, dijo Trautman. Trautman trabaja en el centro de pronóstico de avalanchas en Bellingham, Washington, uno de los 14 que opera el Servicio Forestal.
“El peligro de avalanchas cambia día a día, a veces hora a hora. Por eso es importante, antes de salir, buscar la información más reciente y tener en cuenta las condiciones cambiantes”.
Para determinar ese riesgo, debe consultar el pronóstico de avalanchas en su destino a través de Avalanche.org . La herramienta en línea, una asociación entre el Servicio Forestal y la Asociación Estadounidense de Avalanchas, ayuda a conectar al público con la educación sobre avalanchas y a comprender la escala de peligro de avalanchas que va de bajo a extremo.
Los riesgos son calculados diariamente por pronosticadores de avalanchas que observan las condiciones, como el comportamiento de la capa de nieve, la humedad, la temperatura, el viento y cómo estos elementos actúan en diferentes terrenos. Sus hallazgos se actualizan continuamente y se publican en el sitio.
2. Disponer del equipo y la formación adecuados
“Los servicios de emergencia suelen estar demasiado lejos del lugar de la avalancha y el tiempo es importante”, dijo Trautman. “Una persona atrapada bajo la nieve puede no tener más de 20 o 30 minutos. Por lo tanto, en una situación de campo, usted es su propio equipo de rescate”.
Trautman recomienda tres piezas esenciales de equipo que le ayudarán a rescatarse a sí mismo, a un compañero o incluso a un extraño: una baliza de avalancha, una sonda y una pala.
Las balizas de avalancha son transmisores-receptores de radio que indican dónde se encuentra. Son simples y fáciles de usar. Todos los que salen a pasar el día llevan un transmisor-receptor y lo encienden antes de salir de casa. Si alguien de su grupo se ve cubierto por una avalancha, puede cambiar el transmisor-receptor para recibir y localizar rápidamente la señal de su amigo.
Luego, puedes usar una sonda, un palo de fibra de vidrio plegable como la varilla de una tienda de campaña, para determinar la ubicación y la profundidad de donde está enterrada una persona bajo la nieve. Una vez que la hayas localizado, puedes usar tu tercera herramienta, una pala, para liberar rápidamente a tu amigo.
“Tienes un cierto nivel de responsabilidad contigo mismo y con la gente con la que sales”, dijo Trautman. “Tienes que tener el equipo apropiado y saber cómo usarlo”.
Tanto los principiantes como los profesionales pueden acceder a una formación adecuada para aprender a identificar las condiciones peligrosas y utilizar el equipo. Para los principiantes, Avalanche.org cuenta con un tutorial interactivo en línea . Existen muchas oportunidades educativas para quienes desean aprender más, como la posibilidad de encontrar próximos talleres y cursos en el sitio web de Avalanche.org.
3. Sobreviviendo a la avalancha
Incluso si consulta el pronóstico local, tiene el equipo adecuado y está entrenado para sobrevivir a una avalancha, aún existe la posibilidad de que se encuentre mirando hacia arriba y vea una pared de nieve que se mueve rápidamente. Si está bien entrenado, esos instintos aprendidos deberían activarse para aumentar sus posibilidades de supervivencia.
Muchos factores pueden afectar la tasa de supervivencia, como el tiempo que uno permanece enterrado bajo la nieve, la profundidad a la que se encuentra enterrado y las lesiones que sufre cuando es arrastrado por la montaña.
“En primer lugar, trate de salir del camino. Haga todo lo posible para no quedar atrapado en el alud”, dijo Trautman. “Estar en medio de una avalancha es como quedar atrapado en un río de corriente rápida. El consejo más común es moverse en diagonal a la avalancha o tratar de llegar al borde, donde el alud no se mueve tan rápido y donde es menos probable que quede enterrado tan profundamente”.
Sin embargo, hay algo que puedes hacer si te encuentras en el camino de una avalancha de tamaño razonable. Intenta orientar los pies cuesta abajo de modo que la parte inferior del cuerpo, no la cabeza, reciba la mayor parte del impacto. Otra forma de proteger la cabeza es enroscarte en una bola.
“Y una vez que finalmente descanses, debes relajarte porque sabes que tus compañeros están entrenados y vendrán a buscarte”, dijo Trautman.
Las avalanchas han pillado desprevenidas a muchas personas de distintos niveles de habilidad.
"Vemos a mucha gente que se ve atrapada en avalanchas y que realmente están yendo al límite. Y también vemos gente que no se da cuenta de que están yendo al límite", dijo.
Independientemente de la actividad de nieve que elija una persona, cualquiera que atraviese una zona nevada debe estar capacitado, equipado adecuadamente y conocer los peligros.
“Recuerde, la mejor manera de sobrevivir a una avalancha es no meterse en ella en primer lugar”, dijo Trautman. “Al final, todos salimos a divertirnos. Diviértase: vaya preparado”.
