WASHINGTON, 31 de agosto de 2017 – El Servicio de Alimentos y Nutrición (FNS) del USDA está trabajando activamente con funcionarios de Texas y Luisiana para garantizar que las personas afectadas por el huracán Harvey tengan acceso a alimentos ahora y después de que se completen las operaciones de emergencia.
“En este momento de crisis, con muchos supermercados cerrados y otras fuentes de alimentos no disponibles, el USDA se compromete a garantizar que nuestros compatriotas estadounidenses obtengan la nutrición vital que necesitan y está agilizando los procedimientos para que eso suceda”, dijo el Secretario de Agricultura Sonny Perdue. “El presidente Trump le dejó en claro a su gabinete que ayudar a las personas es la primera prioridad, y que el proceso y el papeleo pueden esperar hasta más tarde. El USDA ya está haciendo el trabajo para ayudar a las personas necesitadas hoy”.
El Servicio de Alimentos y Nutrición (FNS) del USDA está trabajando con funcionarios de la región afectada para ayudar a alimentar a los residentes desplazados y afectados. La agencia ha otorgado varias exenciones en Texas que permiten a las escuelas del Programa Nacional de Almuerzos Escolares proporcionar comidas gratuitas. También ha brindado más flexibilidad a las escuelas en cuanto a lo que pueden alimentar a los niños, dadas las dificultades de preparar alimentos específicos durante este período.
“El FNS trabaja todos los días para garantizar que los estadounidenses tengan acceso a alimentos, pero es en situaciones como esta que debemos ser ágiles”, dijo el administrador del FNS, Brandon Lipps. “Nuestro trabajo es hacer que sea lo más fácil posible que nuestros programas se administren de una manera que garantice que ninguna persona afectada por este desastre pase hambre”.
Las medidas ya adoptadas por el USDA en Texas incluyen:
- Aprobación de una solicitud de funcionarios de Texas para eximir las regulaciones del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) para permitir que los participantes del programa compren alimentos calientes y alimentos calientes listos para comer con sus beneficios. FNS ha notificado a los minoristas autorizados de SNAP en Texas sobre esta exención, que estará vigente hasta el 30 de septiembre.
- Apoyar al estado en sus planes de cambiar el cronograma completo de emisión de SNAP para septiembre al primer día del mes para que las familias tengan acceso a sus beneficios mensuales antes durante este momento de crisis inmediata.
- Permitir que todas las escuelas de los condados declarados en situación de desastre eximan de los requisitos de planificación de menús y de horarios de servicio de comidas del Programa Nacional de Almuerzos Escolares. Esto permitirá que las escuelas sirvan comidas que no cumplan con los requisitos de planificación de menús o de horarios de servicio de comidas para escuelas e instituciones y centros de cuidado infantil en las áreas afectadas hasta el 30 de septiembre.
- Permitir que todas las escuelas afectadas por el desastre proporcionen comidas a todos los estudiantes sin cargo y sean reembolsados a la tasa de reembolso gratuito hasta el 30 de septiembre.
- Brindar al estado la flexibilidad necesaria para permitir que las personas mayores que participan en el Programa Suplementario de Alimentos Básicos en las áreas de servicio afectadas por el huracán reciban dos paquetes de alimentos en septiembre para compensar la pérdida de su beneficio alimentario de agosto.
- Se aprueba que Texas designe escuelas que no se vieron directamente afectadas por el huracán para que sirvan como organizaciones y refugios en caso de desastre, de modo que los alimentos del USDA se puedan utilizar para la alimentación colectiva, brindando así asistencia alimentaria fundamental a quienes la necesitan. Los alimentos del USDA incluyen una variedad de productos enlatados, frescos, congelados y secos, que incluyen frutas, verduras, carnes y cereales integrales.
Los detalles de las exenciones se pueden encontrar aquí . El FNS está brindando simultáneamente asistencia técnica a Luisiana y ofreciendo apoyo según sea necesario.
Los esfuerzos de respuesta del FNS van más allá de estos programas. El programa WIC del FNS cuenta con políticas establecidas para permitir que el estado tenga flexibilidad en el diseño y la administración del programa para respaldar la continuidad de los beneficios para los participantes en tiempos de desastres naturales. Debido a que varias clínicas WIC resultaron dañadas o cerraron durante el huracán, el FNS realizó una conferencia telefónica con la agencia estatal WIC de Texas para brindar esta información y ofrecer cualquier otra asistencia técnica necesaria para garantizar que los participantes del WIC recibieran ayuda para obtener alimentos.
Aunque todavía no se han solicitado alimentos del USDA, el FNS ha coordinado con el Departamento de Agricultura del Estado de Texas para proporcionar entregas de alimentos a organizaciones voluntarias según sea necesario. El FNS ha determinado los suministros de alimentos del USDA disponibles en Arkansas, Luisiana, Oklahoma y Texas en previsión de las solicitudes de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias para proporcionar entregas de alimentos.
FNS también está listo para apoyar al estado con otras exenciones de SNAP que puedan ser necesarias para apoyar a los beneficiarios que han perdido alimentos debido al desastre y para simplificar el proceso de solicitud para los hogares afectados, así como exenciones que cubren los sitios del Programa de Alimentos para el Cuidado de Niños y Adultos y las escuelas utilizadas como refugios.
Además, el FNS proporcionará fórmula infantil y alimentos a los bebés y niños alojados en refugios colectivos para desastres si así se lo solicitan. Por lo general, el FNS puede satisfacer una solicitud de estos artículos entre 24 y 48 horas después de recibir una solicitud del estado o de la FEMA.
En las próximas semanas, a pedido del estado, FNS también estará listo para ofrecer asistencia alimentaria continua a través del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria en Desastres (D-SNAP), después de que se hayan restablecido los canales comerciales de distribución de alimentos y las familias puedan preparar alimentos en casa, enfatizó Perdue.
Para simplificar la administración del programa en situaciones de desastre, el proceso de solicitud y elegibilidad del D-SNAP se acorta y se simplifica. En momentos en que el D-SNAP se vuelve necesario, los hogares de bajos ingresos que normalmente no son elegibles según las reglas regulares del programa pueden calificar para el D-SNAP si cumplen con los límites de ingresos por desastre, que son ligeramente más altos, y tienen gastos relacionados con el desastre que califican, como pérdida de ingresos, daños a la propiedad y gastos de reubicación. Además, los clientes actuales del SNAP también pueden recibir asistencia por desastre en forma de un suplemento, cuando sus beneficios son menores que el máximo mensual, para ayudar a reemplazar los alimentos destruidos en el desastre.
El Servicio de Alimentos y Nutrición del USDA administra 15 programas de asistencia nutricional, incluidos los programas nacionales de desayuno y almuerzo escolar, el Programa de alimentos para el cuidado de niños y adultos, el Programa de servicio de alimentos de verano, el Programa especial de nutrición complementaria para mujeres, bebés y niños y el Programa de asistencia nutricional complementaria , que juntos conforman la red de seguridad nutricional de los Estados Unidos. Para obtener más información sobre la asistencia del FNS en tiempos de desastre, visite www.fns.usda.gov .
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